La exposición excesiva al sol puede ser perjudicial para la salud de tu piel, aunque el sol es importante para prevenir la deficiencia de vitamina D. La misma es fundamental para absorber el calcio, necesario para la formación de los huesos. Juega un papel importante en los sistemas nervioso, muscular e inmunitario, sistema clave en la lucha contra el coronavirus, reforzándolo y protegiéndolo.
Es por eso que luego de esta época de pandemia donde hemos permanecido más tiempo en casa el verano es un buen momento para estimular la síntesis de Vitamina D disfrutando del sol con precaución.
La piel en este momento podría estar más vulnerable para aquellos que no han tenido una adaptación a la exposición solar, por lo que se hace imprescindible utilizar protección solar con un factor elevado, renovándola cada 2 horas, y evitar exponerse al sol las horas centrales del día.
También recomendamos agregar en la dieta alimentos fuente de Vitamina D: leche y los cereales adicionados, pescados grasos como la caballa, el salmón, el atún o las sardinas. El hígado vacuno, la yema de huevo y el queso